Con la celebración de una Eucaristía, el 21 de enero en la parroquia Sagrados Corazones de Madrid, la Provincia Ibérica de los Sagrados Corazones y el equipo de Revista 21 (antes Reinado Social) han dado gracias a Dios por el camino recorrido durante los 104 años de actividad de este medio de comunicación social.
En su homilía, el Superior Provincial de los Sagrados Corazones, Aurelio Cayón, ha destacado que «nuestra acción de gracias va acompañada de tres palabras que expresan bien lo que estamos invitados a compartir al celebrar esta eucaristía de clausura: Alegría, agradecimiento y misericordia. Alegría al hacer memoria de la revista porque hemos sido testigos del proyecto de Dios para nuestro mundo. Agradecimiento a muchas personas sencillas que se han visto enriquecidas por la lectura de la revista, siempre desde la luz que aporta el evangelio de Jesús. Nuestra revista nos ha hablado también de la gran misericordia de Dios, cuando ha aportado reflexión y también cuando ha sido altavoz para dar a conocer hermanos nuestros que han sido testigos de su Misericordia, como Damián de Molokai».
Ya en la acción de gracias, la directora de la Revista 21, Tamara Cordero, ha agradecido a los asistentes su presencia en esta eucaristía porque «sabemos que el Señor no nos ha dejado solos en esta tarea de la comunicación y nos ha acompañado por el camino». También ha dado gracias a Dios «por todas las personas que han formado parte de esta familia: todos los trabajadores que han pasado por Reinado Social en sus 104 años de vida, sus cientos de colaboradores y sobre todo, por las representantes y los suscriptores».
Tras la eucaristía, Tamara Cordero, que ha sido nombrada directora de la recién creada Oficina de Comunicación de la Provincia Ibérica de los Sagrados Corazones, ha compartido con todos los asistentes la apasionante tarea que tiene la Congregación por delante. «Hacer nuestra la herencia que Revista 21 nos deja nos anima no solo a explorar diferentes formatos y herramientas, si no a seguir compartiendo la fe con todos los que quieran acercarse a conocer el carisma de la Congregación». Terminaba su intervención con un deseo: «Ojalá seamos capaces de transmitir con sencillez e ilusión el carisma de la Congregación, promoviendo cada vez más un estilo de comunicación participativo, acercándonos a las periferias existenciales, desde esa creatividad sinodal a la que nos emplaza la Iglesia actual y a la que nos urge la propia sociedad, para contemplar, vivir y anunciar el Amor de Dios encarnado en Jesús, que es nuestra misión».
Al término de la celebración, los asistentes han podido compartir un vino español en los salones parroquiales para cerrar esta etapa de la que la Provincia Ibérica de los Sagrados Corazones se despide con el corazón agradecido a todo lo vivido y aprendido durante el camino compartido en Reinado Social.
