Un encuentro multicultural, intergeneracional, pero sobre todo lleno de Dios, de este Buen Dios que nos llama y nos invita a dejarnos sorprender en la cotidianidad de cada día.
El viernes comenzamos con la cena y compartiendo anécdotas que nos ayudaron a conocernos un poquito más. El sábado fue un día intenso en el que poder conectar cada uno con “lo sorprendente de Dios” en nuestras vidas. La mañana del domingo, pudimos escuchar los testimonios de María Vidal y Alphons, de sus palabras también se traslucía la sorpresa de Dios en sus corazones agradecidos, lo que Dios ha ido haciendo en sus vidas. Para terminar celebramos juntos la Eucaristía, ¡cuánto que reconocer y agradecer!
Gente llena de esperanza y alegría. En los Sagrados Corazones de Jesús y de María nos encontramos.
Araceli Galán Martín, prenovicia ss.cc. |